Gestión del agua en el medio rural: eficiencia y circularidad

RESUMEN EJECUTIVO

El agua es un recurso estratégico para la sostenibilidad del medio rural, no solo por su función básica en actividades agroganaderas, sino también por su papel en la salud pública, la resiliencia territorial y la economía local. En las regiones que conforman la España Verde —Galicia, Asturias, Cantabria y Euskadi— el agua ha sido históricamente abundante, lo que ha favorecido un modelo de aprovechamiento extensivo, poco orientado a la eficiencia y sin una cultura consolidada de circularidad hídrica. Sin embargo, el cambio climático, la presión sobre los ecosistemas acuáticos y el deterioro de infraestructuras rurales obligan a repensar el modelo.

Este estudio analiza las dinámicas actuales de gestión del agua en entornos rurales del norte peninsular, con un enfoque territorial que incluye tanto el ciclo urbano del agua como los usos agropecuarios, forestales y ambientales. Se abordan los retos técnicos, sociales y normativos para alcanzar un modelo más eficiente, resiliente y circular, que permita garantizar la sostenibilidad hídrica de las comunidades rurales a medio y largo plazo.

A partir de datos oficiales, entrevistas técnicas y revisión de experiencias locales, el estudio identifica tres ámbitos clave de intervención:

  1. la mejora de la eficiencia en redes de distribución y riego,

  2. la incorporación de tecnologías de reutilización y depuración adaptadas al medio rural,

  3. la implementación de modelos de gobernanza hídrica participativa y multinivel.

Se documentan casos reales de buena práctica en cada una de las cuatro comunidades analizadas, que incluyen proyectos de microdepuración, redes de riego por goteo solar, recuperación de humedales rurales y consorcios de gestión compartida del recurso. Estas experiencias demuestran que la innovación en la gestión del agua no requiere necesariamente grandes infraestructuras, sino una combinación de planificación inteligente, apoyo institucional y apropiación social.

El informe concluye que la transición hacia un modelo de gestión eficiente y circular del agua en el medio rural requiere visión estratégica, inversión sostenida y adaptación tecnológica. Además, es indispensable superar la lógica sectorial y fragmentada que ha caracterizado la política hídrica rural, apostando por una visión ecosistémica e integradora donde el agua se conciba como un bien común que estructura el futuro de los territorios rurales.

1. INTRODUCCIÓN

La gestión del agua en el medio rural representa uno de los grandes desafíos estructurales para la sostenibilidad territorial en el contexto actual de cambio climático, presión demográfica inversa y transformación productiva. Lejos de ser un problema exclusivo de zonas áridas, la planificación hídrica en territorios con abundancia relativa —como ocurre en buena parte de Galicia, Asturias, Cantabria y Euskadi— también se enfrenta a importantes tensiones relacionadas con la eficiencia, el despilfarro, la fragmentación competencial y la falta de integración ecosistémica (WWAP, 2021).

Durante décadas, el agua en las zonas rurales del norte peninsular ha sido considerada un recurso prácticamente ilimitado. Esto ha favorecido una cultura de uso extensivo, con escasa preocupación por la pérdida en redes, la calidad del vertido o la reutilización de aguas residuales tratadas. Sin embargo, los efectos del cambio climático —más episodios de sequía estacional, alteración del régimen de precipitaciones, disminución de caudales base— están empezando a modificar esa percepción, incluso en territorios tradicionalmente húmedos (González & López, 2022). A ello se suman fenómenos como la despoblación, el envejecimiento de infraestructuras hidráulicas o la desconexión entre planificación hídrica y ordenación del territorio.

El modelo de gestión hídrica heredado se caracteriza por su rigidez sectorial: ciclo urbano del agua, usos agroganaderos, abastecimiento doméstico, mantenimiento ecológico y gestión forestal han operado con lógicas paralelas, sin visión integrada ni mecanismos eficaces de cooperación intersectorial. Esta fragmentación reduce la eficacia de las inversiones, dificulta la implementación de soluciones innovadoras y limita la resiliencia frente a episodios extremos.

Frente a este escenario, el concepto de circularidad hídrica aporta un nuevo marco que permite repensar el modelo desde la eficiencia, la recuperación de recursos y la integración territorial. La reutilización de aguas regeneradas, la implantación de soluciones descentralizadas, el control inteligente de fugas o el cierre de ciclos a escala local se configuran como herramientas clave para garantizar un uso sostenible del recurso (EEA, 2020). Pero su aplicación práctica en el medio rural requiere adaptar tecnologías, reforzar capacidades locales y, sobre todo, impulsar modelos de gobernanza participativa.

Las zonas rurales de la España Verde se encuentran en una encrucijada. Disponen de recursos hídricos valiosos, pero también afrontan vulnerabilidades crecientes y modelos de gestión obsoletos. Las nuevas políticas europeas y estatales —como el Plan Nacional de Depuración, Saneamiento, Eficiencia, Ahorro y Reutilización (Plan DSEAR)— ofrecen una oportunidad para modernizar la gestión hídrica desde la sostenibilidad, la digitalización y la economía circular. Pero para que estas herramientas sean efectivas, es imprescindible adaptarlas a la escala, complejidad y diversidad de los territorios rurales.

Objetivos del estudio

  1. Analizar los principales retos de la gestión del agua en zonas rurales de Galicia, Asturias, Cantabria y Euskadi.

  2. Evaluar el grado de implementación de soluciones orientadas a la eficiencia y circularidad hídrica.

  3. Identificar experiencias reales de innovación en la gestión del agua adaptadas al medio rural.

  4. Proponer líneas estratégicas para una transición hídrica justa, eficiente y territorialmente cohesionada.

GLOSARIO

Agua regenerada
Agua residual que ha sido tratada mediante procesos físicos, químicos o biológicos hasta alcanzar una calidad adecuada para su reutilización segura en usos no potables (riego, usos industriales, recarga de acuíferos, etc.).

Circularidad hídrica
Modelo de gestión que busca maximizar la reutilización del agua, minimizar el vertido y recuperar recursos energéticos y materiales del ciclo del agua. Se basa en la integración de procesos y la eficiencia en todas las fases.

Depuración descentralizada
Sistema de tratamiento de aguas residuales localizado a pequeña escala (normalmente en el mismo punto de generación), adaptado a núcleos rurales o zonas dispersas, con menor inversión que las plantas convencionales.

Eficiencia hídrica
Relación entre el uso del agua y los resultados obtenidos. Implica minimizar las pérdidas en distribución, optimizar el consumo por unidad de producción y evitar usos ineficientes o redundantes del recurso.

Gobernanza hídrica
Conjunto de procesos, normas, instituciones y actores implicados en la toma de decisiones sobre el agua. Incluye la coordinación entre niveles administrativos, la participación social y la coherencia entre políticas.

Plan DSEAR
Acrónimo del Plan Nacional de Depuración, Saneamiento, Eficiencia, Ahorro y Reutilización. Es la estrategia estatal española para mejorar el ciclo integral del agua desde una perspectiva circular, eficiente y ambientalmente responsable.

Reutilización del agua
Uso de agua previamente usada y tratada para un nuevo propósito que no requiera agua potable. Requiere garantizar la seguridad sanitaria y controlar los riesgos ambientales asociados.

Red de riego inteligente
Infraestructura agrícola que incorpora sensores, control remoto y algoritmos de optimización para ajustar el suministro de agua a las condiciones reales del suelo, el clima y los cultivos, reduciendo el despilfarro.

2. METODOLOGÍA

2.1. Enfoque general

Este estudio se basa en un enfoque cualitativo-territorial, orientado a analizar cómo se gestionan los recursos hídricos en el medio rural de la España Verde, y hasta qué punto se están incorporando criterios de eficiencia, sostenibilidad y circularidad en la práctica. Lejos de limitarse a un enfoque técnico, se adopta una perspectiva ecosistémica e integrada, que considera los aspectos ecológicos, sociales, institucionales y económicos de la gestión del agua.

El objetivo no es producir una evaluación cuantitativa exhaustiva, sino construir una base de análisis sólida que permita identificar cuellos de botella, buenas prácticas y oportunidades de transición. Para ello, se ha combinado revisión bibliográfica, análisis de datos públicos, entrevistas exploratorias con técnicos locales y sistematización de experiencias territoriales.

2.2. Delimitación territorial y temporal

El estudio se centra en los territorios rurales de Galicia, Asturias, Cantabria y Euskadi. La definición de “medio rural” sigue los criterios establecidos por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO, 2023), priorizando áreas con baja densidad de población, estructuras agrarias activas y dependencia directa de recursos hídricos naturales. Se han excluido las áreas urbanas o metropolitanas, salvo en casos donde su relación con zonas rurales es directa (por ejemplo, abastecimientos interconectados o cuencas compartidas).

El periodo de análisis principal es 2015–2024, con especial atención al último quinquenio, cuando se han intensificado los debates normativos, las líneas de financiación europea y la implementación de proyectos piloto relacionados con el agua en el medio rural.

2.3. Fuentes de información

Se han empleado las siguientes fuentes principales:

  • Documentación técnica y legal: estrategias autonómicas del agua, planes hidrológicos de cuenca, normativa sobre reutilización (Real Decreto 1620/2007), el Plan DSEAR y documentos técnicos de confederaciones hidrográficas.

  • Estadísticas públicas: Instituto Nacional de Estadística (INE), Observatorio de la Sostenibilidad, MITECO, y datos disponibles en el Sistema Nacional de Información de Agua de Consumo (SINAC).

  • Experiencias locales: documentación de proyectos Leader, informes de Grupos de Acción Local, y bases de datos de proyectos financiados por LIFE, Interreg y Next Generation EU.

  • Entrevistas semiestructuradas: realizadas a técnicos de ayuntamientos, responsables de pequeñas comunidades de regantes y gestores de instalaciones de microdepuración.

2.4. Selección de casos territoriales

Se han seleccionado ocho casos reales (dos por comunidad autónoma), siguiendo criterios de:

  1. Representatividad territorial y funcional: diversidad de paisajes hídricos (montaña, costa, cuenca media), y diferentes tipologías de gestión (regadío, abastecimiento, depuración).

  2. Innovación o eficiencia demostrada: deben incorporar elementos de circularidad hídrica, mejora técnica, o gobernanza innovadora.

  3. Capacidad de transferencia: se priorizan proyectos documentados, replicables y con resultados evaluables, aunque no todos estén en fase consolidada.

Cada caso ha sido sistematizado en base a una ficha analítica común que recoge: contexto territorial, actores implicados, tecnología empleada, logros y barreras, mecanismos de financiación y marco normativo aplicable.

3. ANÁLISIS Y RESULTADOS

3.1. Ineficiencias estructurales en la gestión hídrica rural

Uno de los principales problemas que afectan a la gestión del agua en el medio rural de la España Verde es la persistencia de ineficiencias estructurales que se arrastran desde hace décadas. Estas ineficiencias no son únicamente técnicas o de infraestructuras, sino que responden también a factores institucionales, sociales y culturales que condicionan la manera en que se organiza, usa y valora el recurso.

a) Pérdidas en redes de abastecimiento y distribución

Muchas redes de abastecimiento rural fueron diseñadas hace más de 30 años y presentan altos niveles de pérdida por fugas, corrosión o materiales obsoletos. En zonas como la montaña lucense o la comarca de Enkarterri en Euskadi, los niveles de pérdidas superan el 40% del agua captada (MITECO, 2022). Estas fugas implican un despilfarro energético, económico y ecológico que resulta especialmente preocupante en contextos de estrés hídrico estacional.

b) Depuración insuficiente o inexistente

Más del 50% de los núcleos rurales de menos de 2.000 habitantes equivalentes en Galicia y Asturias no cuentan con sistemas de depuración adaptados (Plan DSEAR, 2021). En muchos casos, las aguas residuales se vierten directamente a cauces naturales sin tratamiento adecuado, generando impactos sobre la calidad del agua y los ecosistemas acuáticos. La inexistencia de soluciones adaptadas a la baja densidad de población impide cumplir con las directivas europeas y pone en riesgo la salud pública y la biodiversidad fluvial.

c) Fragmentación institucional

La gestión hídrica rural está repartida entre múltiples actores: ayuntamientos, mancomunidades, consorcios, confederaciones hidrográficas y comunidades de usuarios. Esta fragmentación genera solapamientos, vacíos competenciales y dificultades para aplicar soluciones integrales. En Cantabria, por ejemplo, la coexistencia de pequeños sistemas municipales sin coordinación ha limitado la eficacia de los fondos europeos destinados a saneamiento y abastecimiento.

d) Escasa incorporación de tecnologías eficientes

A diferencia del ámbito urbano, donde se ha avanzado en digitalización, control remoto y sensorización, las zonas rurales presentan un retraso significativo en la adopción de tecnologías de eficiencia hídrica. Sistemas de telegestión, detección de fugas en tiempo real o contadores inteligentes apenas están presentes, salvo en experiencias piloto. Esto limita la capacidad de anticipación y optimización del recurso.

e) Cultura de abundancia y baja percepción del problema

Paradójicamente, en muchos territorios del norte peninsular sigue vigente una “cultura de abundancia” que dificulta la toma de conciencia sobre la necesidad de gestionar el agua de forma eficiente. La percepción generalizada de que “siempre llueve” impide a menudo reconocer la creciente irregularidad del régimen hídrico, y frena la implantación de soluciones innovadoras por considerarlas innecesarias o costosas.

Casos documentados

  • Galicia: en el municipio de Cervantes (Lugo), un estudio técnico de 2022 detectó pérdidas del 48% en la red de abastecimiento por falta de mantenimiento y materiales de fibrocemento en mal estado.

  • Asturias: en Peñamellera Alta, el vertido sin tratar de aguas residuales al río Cares motivó sanciones de la CHC y un proyecto posterior de depuración modular cofinanciado por el programa Interreg.

  • Cantabria: en municipios del entorno del Saja-Nansa, la falta de coordinación entre sistemas municipales impidió durante años consolidar una solución comarcal de depuración conjunta.

  • Euskadi: en la Cuadrilla de Montaña Alavesa, los escasos recursos técnicos y económicos de los pequeños ayuntamientos han llevado a aplazar durante más de una década la renovación de redes con pérdidas superiores al 35%.

3.2. Casos de eficiencia y circularidad hídrica rural

A pesar de las carencias estructurales detectadas, existen en el medio rural de la España Verde iniciativas que han logrado aplicar soluciones eficaces, replicables y ambientalmente sostenibles para una mejor gestión del agua. Estas experiencias muestran que la eficiencia hídrica y la circularidad no son exclusivas del ámbito urbano o industrial, sino que pueden y deben adaptarse a la realidad territorial rural, con criterios de escala, resiliencia y sostenibilidad.

GALICIA

1. Rede de rego solar en A Limia (Ourense)
Este proyecto, impulsado por el INORDE y cooperativas agrarias, combina riego por goteo alimentado con energía solar, sensores de humedad y programación semanal adaptada al cultivo. En una zona tradicionalmente intensiva en el uso del agua, el sistema ha logrado reducir el consumo un 35% en cultivos de patata y forraje. Además, ha mejorado la calidad del suelo y la rentabilidad de las explotaciones.

2. Microhumedales restaurados en la Terra Chá
La Fundación Fragas do Mandeo ha liderado un plan de restauración de pequeñas zonas encharcadas degradadas para mejorar la retención hídrica y aumentar la biodiversidad. Estos espacios actúan como esponjas naturales, recargando acuíferos, regulando escorrentías y sirviendo como filtros biológicos.

ASTURIAS

3. Depuración natural en Yernes y Tameza
Con apoyo del programa LIFE, se ha instalado un sistema de depuración por humedales artificiales que trata las aguas residuales del municipio sin consumo energético, con costes de mantenimiento mínimos y alta aceptación social. La calidad del vertido cumple con la normativa y el sistema se integra paisajísticamente en el entorno rural.

4. Red inteligente de abastecimiento en Villaviciosa
La empresa pública municipal ha digitalizado la red, incorporando sensores de caudal y presión, contadores remotos y algoritmos predictivos. Las pérdidas se han reducido en un 28% y se han eliminado los cortes no programados. Además, se ha desarrollado una app para la ciudadanía que permite reportar fugas y consultar el consumo diario.

CANTABRIA

5. Proyecto “Agua circular Pasiega”
Impulsado por el Grupo de Acción Local de los Valles Pasiegos, combina la recogida de aguas pluviales en explotaciones ganaderas, su filtrado y reutilización para limpieza y refrigeración. Además, se han instalado depósitos interconectados entre fincas y sistemas de monitoreo de calidad. El ahorro medio supera los 100.000 litros por granja al año.

6. Depuradora ecológica modular en Valderredible
El ayuntamiento, con financiación del Gobierno de Cantabria, ha implantado una depuradora tipo “biorreactor de membranas” con carga orgánica variable, adaptada a la estacionalidad de población. Su diseño permite escalabilidad, tratamiento de nutrientes y reutilización para riego de zonas verdes.

EUSKADI

7. Cooperativa Gorbeia – Gestión compartida del agua
Agricultores, pastores y gestores forestales de la comarca se han agrupado para optimizar la captación, almacenamiento y reparto del agua de manantial. Mediante un acuerdo de custodia hídrica, regulan los turnos de uso, gestionan la limpieza de captaciones y monitorizan caudales con sensores instalados colectivamente.

8. Planta de reutilización de aguas grises en Zeberio
Este pequeño municipio ha instalado un sistema de tratamiento primario y terciario que permite reutilizar aguas grises (lavabo, ducha) para cisternas y riego de huertos municipales. El sistema ha sido replicado en otros tres ayuntamientos vizcaínos y se acompaña de talleres sobre uso responsable del agua.

Aprendizajes comunes

  1. Adaptación tecnológica a escala local
    Todas las soluciones comparten un enfoque de tecnología apropiada: sencillas de mantener, adaptadas al número de habitantes y con bajo consumo energético.

  2. Impulso desde la colaboración territorial
    En la mayoría de casos, el liderazgo ha sido compartido entre instituciones locales, técnicos especializados y entidades sociales o agrarias, lo que ha favorecido la aceptación.

  3. Financiación mixta e innovación administrativa
    La combinación de fondos europeos (Leader, LIFE, Next Gen), ayudas autonómicas y aportaciones locales ha permitido ejecutar los proyectos. En algunos casos, se han creado figuras jurídicas innovadoras como consorcios o cooperativas hídricas.

  4. Evidencia del impacto
    Aunque no todos los proyectos tienen evaluaciones científicas, sí existen indicadores operativos claros: reducción de consumo, mejora de calidad del vertido, aumento de biodiversidad o ahorro económico directo.

 

4. DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES

La gestión del agua en el medio rural sigue siendo, a día de hoy, una de las áreas más desatendidas dentro de las políticas públicas territoriales, pese a su papel crítico en la sostenibilidad ecológica, la seguridad hídrica y la calidad de vida. El análisis comparado de territorios de Galicia, Asturias, Cantabria y Euskadi revela un patrón común de debilidades estructurales, aunque también muestra con claridad que existen vías posibles —y replicables— hacia un modelo de eficiencia y circularidad adaptado al medio rural.

4.1. Una realidad fragmentada y heterogénea

Una de las principales conclusiones del estudio es la enorme disparidad entre territorios y, dentro de ellos, entre municipios. Aun en regiones con recursos hídricos relativamente abundantes, como Galicia o Euskadi, se detectan problemas críticos de distribución, depuración o gobernanza. Esta heterogeneidad no responde solo a condiciones físicas o climáticas, sino a diferencias en capacidad técnica, voluntad política local, modelos de gestión y acceso a financiación.

La fragmentación institucional sigue siendo una traba fundamental. Múltiples ayuntamientos con competencias compartidas, sin masa crítica para sostener infraestructuras eficientes, operan sin mecanismos reales de coordinación. En muchos casos, la decisión sobre inversiones hídricas se limita a criterios cortoplacistas o clientelares, sin visión de ciclo integral del agua ni principios de economía circular.

4.2. Circularidad: un principio aún incipiente

Aunque la economía circular aplicada al agua comienza a estar presente en la agenda normativa (como muestra el Plan DSEAR), su aterrizaje en los municipios rurales es todavía testimonial. Pocas instalaciones reutilizan aguas regeneradas, apenas se incorpora la recogida de pluviales, y la valorización energética de lodos de depuración o el tratamiento terciario siguen siendo tecnologías marginales. A ello se suma la escasa capacitación técnica en las entidades locales para aplicar criterios circulares en sus decisiones de inversión o gestión.

Las experiencias documentadas demuestran, sin embargo, que la circularidad no es un lujo urbano, sino una necesidad estructural también en el rural. Proyectos como los humedales artificiales de Yernes y Tameza o las redes inteligentes de Villaviciosa prueban que es posible implementar modelos avanzados y sostenibles en entornos con limitaciones, si se planifican bien, se financian adecuadamente y se diseñan a escala local.

4.3. Relevancia de la escala y de la tecnología apropiada

Un hallazgo transversal del estudio es que la adecuación tecnológica es más importante que la tecnología en sí misma. Las soluciones que mejor funcionan no son necesariamente las más sofisticadas, sino las que se adaptan mejor a las condiciones del territorio y a la capacidad de mantenimiento local. En este sentido, los proyectos con mayor eficiencia hídrica han apostado por tecnologías de bajo coste, bajo consumo energético, mantenimiento sencillo y escalabilidad.

La red de riego solar en A Limia o la reutilización de aguas grises en Zeberio son ejemplos de cómo la innovación puede ser frugal y efectiva a la vez. Estas soluciones rompen con el mito de que solo las grandes infraestructuras pueden resolver los desafíos hídricos, y apuntan hacia un modelo descentralizado, modular y resiliente.

4.4. Gobernanza, cooperación y comunidad

Otro aspecto clave es el papel de la gobernanza colaborativa. La mayoría de los casos exitosos identificados no han surgido de decisiones unilaterales de la administración, sino de procesos de colaboración entre municipios, técnicos, cooperativas, asociaciones vecinales y grupos de acción local. Esta gobernanza distribuida permite una mejor identificación de necesidades, mayor aceptación social y más eficacia en la ejecución.

El caso de la Cooperativa Gorbeia o el proyecto “Agua Circular Pasiega” muestran que la corresponsabilidad ciudadana en la gestión del agua no solo es viable, sino deseable, especialmente cuando los recursos económicos y humanos son limitados. Apostar por modelos de co-gestión o custodia del agua en el medio rural no es solo una opción técnica, sino también una decisión estratégica para reforzar el tejido comunitario.

4.5. Recomendaciones transversales

Con base en el análisis realizado, se extraen las siguientes recomendaciones:

  • Fomentar consorcios rurales para gestión del agua: facilitar herramientas jurídicas para que pequeños municipios puedan agruparse de forma estable en torno al ciclo del agua.

  • Reorientar la financiación: priorizar fondos que promuevan tecnologías circulares, eficiencia energética y escalabilidad, en lugar de soluciones estándar que no se adaptan al entorno rural.

  • Formación técnica local: crear programas de capacitación para personal técnico de entidades locales en gestión hídrica circular.

  • Sistematizar indicadores de eficiencia rural: actualmente no existen métricas adaptadas a entornos rurales. Se propone desarrollar un índice específico de circularidad hídrica rural.

  • Impulsar plataformas de intercambio de experiencias: un repositorio nacional de buenas prácticas facilitaría la replicabilidad de modelos exitosos entre territorios.

5. LIMITACIONES DEL ESTUDIO

Este estudio, si bien aporta una panorámica documentada y analíticamente estructurada sobre la gestión del agua en áreas rurales de la España Verde, presenta una serie de limitaciones metodológicas y de alcance que deben ser tenidas en cuenta para una correcta interpretación de sus resultados.

En primer lugar, se ha optado por un enfoque cualitativo, basado en la identificación y análisis de casos representativos por comunidad autónoma. Esto permite una aproximación comparativa y contextual, pero no garantiza la exhaustividad del mapeo de iniciativas existentes ni permite generalizar los hallazgos a la totalidad del medio rural español. Es posible que existan otros proyectos relevantes no identificados o documentados en fuentes abiertas.

En segundo lugar, la disponibilidad de datos públicos actualizados sobre eficiencia hídrica, pérdidas en red o indicadores de circularidad en entornos rurales es limitada. Muchos municipios no publican datos desagregados o no cuentan con sistemas de medición normalizados, lo que dificulta la comparación entre territorios y la estimación precisa del impacto.

Asimismo, no todos los proyectos incluidos cuentan con evaluaciones independientes de resultados o análisis de ciclo de vida, por lo que las cifras presentadas deben entenderse como aproximaciones operativas, no como evidencia científica con significación estadística.

Por último, la selección de territorios se ha centrado en Galicia, Asturias, Cantabria y Euskadi, por ser el ámbito geográfico de la España Verde, lo que excluye realidades relevantes de otras zonas rurales del país.

6. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

  • Asociación Española de Abastecimientos de Agua y Saneamiento (AEAS). (2023).
    Presentación de resultados del XVIII Estudio Nacional AEAS-AGA 2023.
    https://aeas.es/

  • Confederación Hidrográfica del Cantábrico. (2023).
    Informe anual de control de vertidos y calidad de aguas.
    https://www.chcantabrico.es

  • European Commission. (2020).
    Water reuse in the EU: setting minimum requirements.
    https://eur-lex.europa.eu/legal-content/EN/TXT/?uri=CELEX%3A32020R0741

  • Fundación Fragas do Mandeo. (2022).
    Restauración de humedales en la Terra Chá.
    https://www.fragasdomandeo.org/

  • Gobierno del Principado de Asturias. (2021).
    Estrategia de Economía Circular de Asturias 2030.
    https://www.idepa.es/

  • Instituto Nacional de Estadística (INE). (2023).
    Cifras oficiales de población y estadísticas de abastecimiento.
    https://www.ine.es

  • Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO). (2022).
    Plan Nacional de Depuración, Saneamiento, Eficiencia, Ahorro y Reutilización (DSEAR).
    https://www.miteco.gob.es/

  • Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). (2021).
    Water Governance in OECD Countries.
    https://www.oecd.org/water/governance

  • Red Española de Desarrollo Rural (REDR). (2022).
    Casos de buenas prácticas en gestión del agua en zonas rurales.
    https://redr.es

  • Global Biodiversity Information Facility – Nodo España (GBIF España). (2023).
    Datos abiertos sobre biodiversidad acuática en España.
    https://www.gbif.es/

Próximo estudio

Fecha de publicación: Miércoles, 8 de octubre de 2025
Título: “ Residuos plásticos en el campo: soluciones de economía circular”

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