En El Bierzo, la tradición vitícola y agroalimentaria convive con proyectos que apuestan por la sostenibilidad, la identidad de territorio y la experiencia emocional. Desde bodegas de microvinificación hasta cooperativas de castañas o colmenares artesanales, estas iniciativas demuestran cómo la pasión por el valle puede convertirse en modelo de negocio y atractivo turístico.
Demencia Wine: la viticultura como acto de pasión
Demencia Wine, fundada en 2016 por Nacho León, rescata viñedos abandonados en torno a Villafranca del Bierzo y los cultiva con mínima intervención, bajo criterios ecológicos y biodinámicos. Cada microvinificación —como “Demencia Godello” o el tinto “Cabarcos”— busca expresar la personalidad del terruño y la historia de su creador. Con visitas concertadas en su nave de Toral de los Vados, ofrece además un festival estival que combina música y vino, creando un vínculo íntimo entre el visitante y la tierra berciana.
Bodegas Pittacum: tradición con alto voltaje moderno
En Arganza del Bierzo, Viñedos y Bodegas Pittacum, parte del Grupo Terras Gauda desde 2002, elabora Mencía de altura en parcelas de suelos de pizarra. Fundada en 1998, combina fermentaciones espontáneas y crianza medida en madera con una oferta de enoturismo que incluye recorrido por viñedos y cata de sus etiquetas “Petit Pittacum” y “Pittacum Aurea”. Con atención al detalle arquitectónico de su casona del siglo XIX, Pittacum atrae a amantes del vino en busca de autenticidad y diseño contemporáneo.
Cooperativa Gistredo: la fuerza de la castaña del Bierzo
En Noceda del Bierzo, la Cooperativa Gistredo aglutina a centenares de productores bajo la marca de garantía “Castaña del Bierzo”. Su modelo cooperativo asegura la calidad y trazabilidad del fruto —seleccionado a mano y envasado en fresco— y preserva el castañar como paisaje cultural. Además, impulsa iniciativas de reforestación y formación técnica, convirtiendo un cultivo histórico en motor de desarrollo local.
Apícola del Bierzo: miel que sabe a monte
La Apícola del Bierzo S. Coop. gestiona colmenares de baja densidad distribuidos por los valles libres de pesticidas. Con colmenas móviles para maximizar la diversidad floral (brezo, bosque mixto, castaño), produce mieles monoflorales muy valoradas. Además, elabora cosmética natural —bálsamos y cremas con cera pura y aceite de oliva local— que ha introducido en herbolarios de León y Valladolid, mezclando el patrimonio apícola con nuevas líneas de negocio.
Huarique Molino: gastronomía peruana en el corazón berciano
En Vega de Espinareda, el restaurante Huarique Molino traslada la cocina limeña al Bierzo. Fundado en 2022 por Rocío Ascue (Lima) y Diego Barrús (madre berciana), ocupa un antiguo molino restaurado. Su carta fusiona tiradito de lubina con toques locales y papas a la huancaína acompañadas de botillo en su versión “fusión”. Además, es espacio cultural con música en vivo, consolidándose como referente de innovación gastronómica y puente entre dos culturas.
Estos ejemplos reales muestran cómo El Bierzo aprovecha su riqueza natural y cultural para generar proyectos con alma. Cada emprendimiento, desde la viña al plato, refuerza el vínculo entre el visitante y el territorio, convirtiendo la visita en una experiencia inolvidable.
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