Tráfico organiza un dispositivo especial para la noche de San Juan

  • Vigilará el tráfico y realizará controles de alcoholemia y drogas en los lugares de mayor afluencia de movimiento por las hogueras

traficoEl Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Ourense tiene previsto realizar un dispositivo especial de vigilancia del tráfico el próximo 24 de junio, con motivo de la festividad de San Juan, estableciendo controles de alcoholemia y drogas en aquellos lugares donde tengan especial incidencia y proliferación de  hogueras.

“Se prevé una gran afluencia de público en torno a las tradicionales hogueras, en las que grupos de amigos se reúnen para disfrutar de la compañía y dar gusto al paladar, antes de saltar las brasas bien entrada la madrugada”, valoran fuentes de Tráfico, apuntando que es habitual que, principalmente entre la juventud, “se produzcan excesos en la ingestión de alcohol, llegándose en algunas ocasiones a mezclarlo con el consumo de drogas”.

Por dicho motivo, para garantizar la seguridad vial y proteger el libre ejercicio de los derechos y libertades de todos los ciudadanos, especialmente en lo que a la circulación de vehículos por las vías públicas se refiere, el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Ourense tiene previsto ejecutar el citado dispositivo especial, que se prevé que tenga una mayor presencia en torno a la ciudad de Ourense, para lo que las fuerzas de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en Ourense no escatimarán ni los medios de que disponen ni tampoco el personal que pueda prestar servicio al ciudadano.

El Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Ourense hace un llamamiento a los conductores para que se abstengan de consumir alcohol o drogas y que cumplan con las normas de circulación, para que con su ayuda se puedan seguir descendiendo los accidentes y las víctimas del tráfico.

También se quiere recordar que la conducción bajo los efectos drogas o alcohol en el organismo puede llegar a ser de una sanción de 1.000 euros y pérdida de 6 puntos en el carnet y que podría constituir un delito contra la seguridad vial, lo que lleva aparejado penas de prisión de tres a seis meses, multa de seis a doce meses y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.

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