Balneario de Mondariz: fundamental en el turismo de bienestar

  • Según el estudio, este turismo crece un 7% al año y las personas que buscan este tipo de experiencias están dispuestos a invertir hasta un 60% más que otro tipo de turistas; además solo en 2020 creció un 10,7% y nada indica que se vaya a detener
  • El proyecto gallego es pionero desde la década de los 90 en una apuesta por la calidad de vida y por la adaptación del termalismo a las necesidades del siglo XXI, siguiendo una tradición de tres siglos de salud natural a partir de las aguas mineromedicinales de esta villa termal

Palacio del agua

 

El Global Wellness Institute acaba de publicar su estudio anual destacando Balneario de Mondariz como el proyecto nacional que ha conseguido impulsar el turismo de bienestar  en los últimos años, convirtiendo a nuestro país en todo un referente en los viajes en busca de la salud y la calidad de vida. La villa termal de Mondariz, pionero en esta oferta desde que en la década de los 90 se recuperara el balneario gallego, es ahora objeto de estudio y ejemplo a seguir en universidades y empresas turísticas.

Este estudio que reconoce el proyecto de salud natural gallego coincide con la elección de Balneario de Mondariz como finalista de la tercera edición de los Premios Wellness Experience que reconocen los mejores spas, balnearios y centros de talasoterapia del año en España, Portugal y Andorra. Este reconocimiento en la categoría de Mejor Balneario se ha basado en la tradición termal del establecimiento gallego, la arquitectura firmada por Genaro de la Fuente y Antonio Palacios, y la innovación en los tratamientos. Una apuesta clara por el termalismo tradicional y la adaptación de este a las necesidades del siglo XXI que abrió con el proyecto Mondariz una nueva línea de negocio, en una época en la que los gurús del turismo desestimaban esta apuesta por lo que consideraban un planteamiento  “de modé” que solo era posible entenderlo en las necesidades del siglo XIX.

Técnica a presión de agua minero medicinal

 

Y es que el turismo de bienestar, aquel que ofrece a los viajeros una experiencia que mejore su calidad de vida, su condición física y emocional, no para de crecer en este tiempo, marcado por la pandemia, y se retroalimenta con otras tendencias en alza como es el caso del turismo rural, según los datos publicados por este organismo.

En esta línea, los balnearios españoles son la alternativa efectiva para quienes buscan descansar en todos los niveles. Espacios diseñados para evocar la relajación de sus huéspedes, con acceso a baños térmicos, con chorros de agua a presión y diferentes actividades a elegir.

El turismo de bienestar también se ha colado en la oferta de servicios de grandes cadenas de hoteles, como es el caso de la Four Seasons: en sus sedes de París, Washington y Praga, ofrecen a sus huéspedes actividades gratuitas guiadas para conocer los alrededores de la ciudad. Según el estudio del Global Wellness Institute, este turismo crece un 7% al año y los turistas que buscan este tipo de experiencias están dispuestos a invertir hasta un 60% más que otro tipo de turistas. 

 ¿Pero por qué triunfa el turismo de bienestar? Aunque parezca evidente, es importante esclarecer las claves del éxito del turismo de bienestar, pues solo en 2015 reportó 563 millones de euros en ganancias y movilizó a más de 600 millones de turistas. La razón está en la idea de que es compatible con un estilo de vida saludable. La vida en la ciudad puede resultar estresante y agotadora, especialmente si no nos tomamos el tiempo de descanso como una parte fundamental de nuestro bienestar. Elegir experiencias turísticas que permitan desconectar de ese entorno, conectar con la naturaleza y despejar la mente de las preocupaciones diarias, permitirá un descanso de mayor calidad que las que se pueden obtener mediante el turismo tradicional. Además, este turismo evita aglomeraciones, tomando  la parte de desconexión muy en serio, por lo que evita a toda costa la acumulación excesiva de gente. De hecho, lo que se busca es crear un entorno zen en el que los turistas puedan obtener descanso de calidad, realizar actividades que no comprometan su estado físico y en las que el aforo sea escaso, una característica muy apreciada en esta época post pandémica.

Mondariz

 

Modelo sostenible

El turismo de bienestar no exige grandes presupuestos o recorrer distancias determinadas para encontrar un enclave que ofrezca una experiencia acogedora. La oferta de turismo de bienestar en España permite, además, conocer el territorio con una mirada más amable y respetuosa, eligiendo destinos de cercanía, primando el respeto por la cultura local. Incluso en los casos en los que decidas explorar fronteras más lejanas, el turismo de bienestar también es un modelo de turismo sostenible, por lo que la ganancia siempre es doble.

La previsión para los próximos años es que la industria del wellness siga creciendo como lo ha hecho hasta ahora: solo en 2020 creció un 10,7% y nada indica que se vaya a detener. Esto también implica que nos enfrentamos a un turista mucho más informado, que sabe lo que quiere y conoce las herramientas que tiene a su alcance para lograrlo. Por eso es importante apostar por la innovación, ofrecer siempre un valor añadido y diferenciar nuestra propuesto de la del resto de actores del sector.

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